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martes, 8 de abril de 2014

Solomillos con leche


    Como ya os habréis imaginado, los solomillos son de cerdo. Ni me planteo comprarlos de ternera. Es una receta de toda la vida. Está muy bien porque es sencilla y asequible, no sólo económicamente, sino también en el sentido de que lleva cosas que siempre tenemos en casa. No es mi receta favorita de cerdo pero está muy rica y queda una salsa curiosa. Rica.

     Ingredientes:
Dos solomillos de cerdo 
Dientes de ajo a discreción
Aceite, sal y pimienta
Medio litro de leche

     Lo primero que hacemos es sellar los solomillos en un fondito de aceite (correspondería a la foto de arriba). Añadimos los ajos sin pelar. Yo puse una media cabeza, es un poco al gusto. Salpimentamos.

     Añadimos la leche. Os digo medio litro pero es aproximado. Que los medio-cubra. Yo no soy de hacer cantidades industriales de salsa. Ya sabéis que al tapar, se va a cocinar aunque no esté cubierto. Dejamos hervir suavemente entre media hora y 45 minutos. Dependiendo de si los solomillos son grandes o pequeños. El cerdo no debe tomarse crudo pero tampoco hace falta rematarlo. 

     Debéis probar una cucharadita de salsa para ver si está bien de sal o necesita más. Sacamos los ajos, los pelamos y los colocamos con la salsa de leche en el vaso de la batidora y batimos todo junto. Queda una salsa muy rica. Si os gusta mucho el ajo, podéis poner una cabeza entera. 



     He preparado también unos champiñones con perejil, aceite y una pizca de mantequilla. También sal, claro. Más ajo no. Yo creo que ya es bastante. A fuego medio. Cuando casi están, añado seis nueces peladas en trocitos no muy chicos. Me encanta como quedan cocinadas. 



     Aquí tenéis el resultado. Presentado para "un diario". Vamos que no me he matado.


     Y en el plato, con el clásico acompañamiento: puré de patatas (de sobre), que en casa les encanta. Creo que el mejor es Maggie ¿se escribe así? Mi truco es restar 50 ml de agua para que quede un poco más espeso. Además: sal y pimienta, nuez moscada y una pizca de mantequilla. Como todo el mundo.

     Aquí queda esta receta. Para mí tiene una pega: demasiado blanco todo. Es mejor servirla en un plato de color para que destaque un poco más. 

     Por supuesto, podéis hacerlo con cinta de lomo. Más barata que los solomillos.

2 comentarios:

  1. Gracias Ana, la hice hoy y les encantó. Fácil, cómoda y muy rica, no se puede pedir más. Un beso

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    1. Gracias a ti, Cuqui. Me alegro de que os gustara. Un beso.

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